Inteligencia Artificial Vs Inteligencia humana.

Antes que nada definiré la IA(a partir de ahora): es el área de la ciencia, incorporando la programación, las matemáticas, lógica y filosofía que estudia la creación y diseño de sistemas capaces de resolver problemas cotidianos por sí mismos, utilizando como paradigma la inteligencia humana.

La IA no es algo sencillo, pero tampoco nada nuevo del Siglo XX.  Ramon Llull nacido en el año 1232,  fue un filósofo, poeta, místico, teólogo y misionero mallorquín y fue un visionario de su época. En 1315, escribe su obra más importante, su libro Ars magna, donde tuvo la idea de que el razonamiento podía ser efectuado de manera artificial. Llull se dedicó a diseñar y construir una máquina lógica. De naturaleza mecánica, en ella las teorías, los sujetos y los predicados teológicos estaban organizados en figuras geométricas de las consideradas «perfectas» (por ejemplo círculos, cuadrados y triángulos). Al operar unos diales y palancas, girando manivelas y dando vueltas a un volante, las proposiciones y tesis se movían a lo largo de unas guías y se detenían frente a la postura positiva (certeza) o negativa (error) según correspondiese. Según el filósofo, la máquina podía probar por sí misma la verdad o mentira de un postulado. 

Con la revolución industrial y el uso de las máquinas para el beneficio humano, años más tarde, comenzaron a construirse los primeros ordenadores, programas básicos de suma y resta, y algoritmos más complejos para cálculos diferenciales, hasta que el «cerebro» del ordenador pasó a formar parte de un ente mecánico. Quisieron implantar ese procesador a una máquina con la que se puediera dialogar, interactuar y como no, que pueda trabajar para nosotros. En la ficción literaria, el escritor Isaac Asimov introdujo las leyes de la robótica por todos conocidos y las hizo populares con relatos como (Yo, Robot)

1. Un robot no hará daño a un ser humano ni, por inacción, permitirá que un ser humano sufra daño.

2. Un robot debe cumplir las órdenes dadas por los seres humanos, a excepción de aquellas que entren en conflicto con la primera ley.

3. Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la primera o con la segunda ley.

Pero la IA va mucho más allá que la de un simple robot que cumple 3 normas básicas y que se quedan obsoletas cuando empezamos a tomar desiciones que competen sólo a los humanos. Decisiones críticas e importantes donde también entran en juego los sentimientos, estados de ánimo, la mentira, la ética, valores morales etc… Estas nuevas IA aprenden de errores anteriores y se «autoprograman». Son autosuficientes en cierto modo. El ejemplo más claro y que todos les resulta familiar son las partidas de ajedrez. Siempre se ha puesto ese juego de estrategia, en parte lógico y matemático, como herramienta para medir los potenciales de los cerebros humanos contra máquinas.

En 1997 Gari Kaspárov, campeón mundial de ajedrez, pierde ante la computadora autónoma Deep Blue.

(No se sabe si Kasparov le da más rabia perder contra la máquina o que esté esa bandera americana representando a la IA)

Deep Blue fue un gran avance en la programación de IA, pero todos sabemos que cualquier juego de estrategia al fin y al cabo es memorizar posiciones y futuribles jugadas. En eso siempre nos ganarán los ordenadores. La cosa cambia cuando son «ellas» las que tienen que tomar decisiones racionales, ahí están en desventaja. La clave está en que la IA llegue a ser perfecta cuando un ser humano no se percate de ella. Obviemos por un momento la gran problemática del exterior de la máquina (piel, carne, hueso, sudor, lágrimas, tonalidad, sensaciones) en eso faltan años de avance. Mediante una simple conversación a ciegas se puede averiguar si estamos ante un BOT o una mente humana, cuando llegue el momento que no lo podamos distinguir la máquina habrá vencido sobre el ser humano.

Para finalizar, debo decir que este es un tema muy complejo y lleno de teorías y experimentos que se invalidan y refutan cada año. Es muy denso cómo para un solo post, pero dejo plantada una semilla para que germine en vuestras cabezas inteligentes, o no.

Más info si quieres seguir investigando sobre el tema.

Prueba de Turing

Alan Turing formuló una teoría décadas antes : «Existirá Inteligencia Artificial cuando no seamos capaces de distinguir entre un ser humano y un programa de computadora en una conversación a ciegas».

Es considerado uno de los padres de la ciencia de la computación y precursor de la informática moderna. Proporcionó una influyente formalización de los conceptos de algoritmo y computación: la máquina de Turing. Formuló su propia versión que hoy es ampliamente aceptada como la tesis de Church-Turing (1936). Durante la segunda guerra mundial, trabajó en descifrar los códigos nazis, particularmente los de la máquina Enigma, y durante un tiempo fue el director de la sección Naval Enigma de Bletchley Park.

En la ficción:

HAL 9000, cuyo nombre es un acrónimo en inglés de Heuristically Programmed Algorithmic Computer (Computador algorítmico heurísticamente programado), es una supercomputadora o superordenador ficticio de tipo mainframe que aparece en las series de Odisea del espacio, iniciada con la novela 2001 A Space Odyssey escrita por Arthur C. Clarke en 1968 (fuente:Wikipedia)

(el ojo que todo lo ve y lo sabe y no es Gran Hermano ni Sauron)

Recomendable 100%

(¿Soy una mujer o una máquina? o lo que es más mortífero…una máquina de mujer)

Sinopsis: Caleb (Domhnall Gleeson) es un joven de 24 años que trabaja en la compañía de Internet más grande del mundo. Un día, Caleb gana una competición, y como premio consigue la posibilidad de pasar una semana en un retiro de montaña perteneciente a Nathan (Oscar Isaac), el cual ocupa un importante puesto en la empresa.

Terminator 3: la rebelión de las máquinas

O cuando Skynet se da cuenta de su IA, se hace autosuficiente y quiere destruir a la humanidad.

(SI, soy Chuache y haré de Terminator hasta que me salga de los webs)

Si quieres continuar leyendo aquí tienes enlace de la Parte 2. IA vs Humanos